Sopita para niños

Los creadores de comidas divertidas para niños, a veces, meten la pata escandalosamente.
Aquí hay un ejemplo: una sopa en que los fideos tiene formas de perritos y ositos panda.


En principio la idea parece atractiva, pero una vez visto el resultado, la cosa cambia:


¡Observa con qué ojitos de pena te miran!
¡¡¡PERO CÓMO TE LOS VAS A COMER!!!
Reconoce que una comida así traumatiza a cualquiera desde su más tierna infancia.
Entiendo que a Mafalda no le guste la sopa.